Esta es la nueva Xbox One S, más pequeña, más bonita y más potente que la anterior Xbox One. Porque seamos sinceros, cuando vi la Xbox One me pareció un trasto muy grande y aparatoso con bastantes fallos de diseño.
Además, la Xbox One siempre partió de una potencia inferior respecto a su competidora, PlayStation 4. Y en esta nueva versión, han solucionado todo esto…¡y mucho más!
La Xbox One S parte de un precio de 299 euros hasta los 399 que cuesta este modelo de 2Tb de almacenamiento.
Cuenta con un bluray 4K y alto rango dinámico en videojuegos, es decir, HDR y permite jugar a todos los juegos del modelo original de Xbox One, y a los compatibles de Xbox 360. Haciendo que tenga un catálogo realmente espectacular gracias a la retrocompatibilidad.
Pero vayamos por partes, la nueva Xbox es un 40% más pequeña que su predecesora, en gran parte porque no necesita el mastodonte de transformador que la otra sí tenía. Ésta lo tiene integrado dentro de la consola. Y únicamente se conecta a la luz mediante un cable.
Elimina el puerto de Kinect para sustituirlo por dos USB que podemos emplear para cargar los mandos o bien para añadirle aún más capacidad al disco duro.
En la parte superior nos encontramos una placa blanca y opaca con perforaciones en su mitad inferior para expulsar el aire a través de un enorme ventilador que mantiene refrigerada la consola.
El diseño general de la Xbox One S ha sido creado para convertirse en un icono del diseño de productos con influencias en equipos de diseño como Apple con Jonny Ivy a la cabeza o Diter Rams de Braun. El Xbox Design Team entre los que están Andrew Kim han hecho un trabajo soberbio a la hora de llevar el diseño minimalista a una videoconsola.
Además, se puede colocar tumbada o vertical con un pie para esta posición. Da un aspecto muy monolítico.
Además del diseño de la consola, Microsoft ha mejorado el mando en dos cosas fundamentales: agarre y conectividad. Ahora la textura es rugosa para evitar que se escurra si te sudan las manos y se conecta por Bluetooth por lo que la distancia de juego es mayor que el IR.
Tambien permite que lo podamos conectar a un PC de un modo más sencillo.
Veamos un poco más la consola por dentro y las novedades que ofrece. Además de ser más pequeña, es más potente que la anterior Xbox One con un procesador más rápido que desbloquea los frames de los juegos a diferencia de la anterior. Así, si la Xbox One S puede, subirá los fps según crea conveniente, de una manera muy similar a lo que ocurre en PC.
Aunque sí emite vídeo en 4K, ya sea con Netflix o bien con Blurays, no permite jugar en esta resolución. Para ello tendremos que esperar a Scorpio seguramente.
El HDR es otra de las grandes bazas para adquirir esta consola. Ahora el negro es más profundo y los colores son más ricos en juegos que sean compatibles como Gears of War 4 o Forza Horizon 3 que saldrán en breve.
Está bien construida y refrigera bien, mejor que su competidora, sin embargo no tan bien como la anterior Xbox One, esto se debe a que la fuente de alimentación se encuentra dentro, y a que tiene menor espacio para disipar el calor.
Además, los ventiladores hacen un poco más de ruido que Xbox One clásica: al ser mas pequeña, el ventilador debe girar más rápido para disipar el calor. Aunque nunca tendremos la sensación de una nave despegando como sí sucedía con la clásica Xbox 360 o la actual PlayStation 4.
El sistema operativo con el que funciona es una versión de Windows 10 con una interfaz preparada para consolas que divide los juegos, los comentarios de redes sociales, la tienda y el resto de contenido multimedia en tablones de una forma muy intuitiva.
La nueva Xbox One S me encanta, me parece que es lo que Microsoft tenía que haber lanzado en 2013 y que lanza ahora. Sin embargo, el hecho de que sea una consola intermedia entre la Xbox One negra y Scorpio es algo que puede hacer que muchas personas no se la compren. Aunque, muchos modelos de Xbox One S ya están agotados incluso en reserva.
Si ya tienes una Xbox One no encuentro nada más allá del diseño increíble que tiene la consola que justifique su compra, sin embargo, si no la tienes y tampoco tienes intención de comprar una tele 4K; es la consola más bonita, y mejor preparada que puedes adquirir en este momento con un catálogo que va desde Forza, Halo o Gears of War a otros multiplataformas.
Un muy buen trabajo por parte de Microsoft, aunque con un timing algo tardío.